Un deseo evaporado que alguien condensará. La muerte de un anhelo, de un erotismo tan simple y tan sublime que la mirada llegó a traspasar la carne.
Una vez más he llorado placer; jamás acudirás con paso lento pero certero... a la deriva en un mar desconocido, dejo que la niebla cubra mis ojos.
____________La Nínfula del Arcángel
miércoles, 14 de octubre de 2009
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1 comentario:
Mira !!!
Éste te quedó chido. Y está largo.
Jaa na !!
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